Hoy se inaugura en el paso fronterizo Mamuil Malal un sismógrafo de última generación que enviará datos en tiempo real sobre la actividad del volcán. Gracias a este instrumento se controlará también a los volcanes Villarrica y Quetrihue.
La Oficina Nacional de Emergencias del Ministerio del Interior de Chile, inaugurará hoy un sismógrafo de banda ancha de última generación en las inmediaciones del complejo fronterizo Mamuil Malal, comuna de Curarrehue, para el monitoreo del volcán Lanín y su zona de influencia. Así lo confirmaron fuentes del Parque Nacional Lanín.
La Oficina Nacional de Emergencias del Ministerio del Interior de Chile, inaugurará hoy un sismógrafo de banda ancha de última generación en las inmediaciones del complejo fronterizo Mamuil Malal, comuna de Curarrehue, para el monitoreo del volcán Lanín y su zona de influencia. Así lo confirmaron fuentes del Parque Nacional Lanín.
Como se apuntó, la ceremonia de inauguración, se realizará en el paso internacional, cerca del mediodía y asistirán autoridades de distintos sectores gubernamentales de la región, como así también representantes del Parque.
Ese instrumento permitirá monitorear en tiempo real el volcán Lanín y toda la actividad sísmica de la zona. La transmisión de datos se hará por conexión satelital hacia el Servicio Sismológico de la Universidad de Chile en Santiago. La información resultante será entregada a la ONEMI, de acuerdo con protocolos establecidos por las autoridades trasandinas, en el menor tiempo posible.
“No existe un registro histórico del Lanín, pero su pared norte presenta flujos piroclásticos datados en 1700 o 2000 años. Esto alcanza para considerarlo un volcán activo. Recién a partir de los 10 mil años se considera fuera de actividad a un volcán”, explicaba en una entrevista editada por este medio, Andrés Folgueras, presidente de la Asociación Geológica Argentina.
“Son cuatro los volcanes que merecen atención. El Peteroa, el Copahue, el Tromen y el Lanín. Todos afectan áreas económicamente importantes de la Argentina.
Dos de ellos tuvieron erupciones recientes constatadas: el Peteroa y el Copahue. El Tromen no tiene registros históricos claros, pero un jesuita ha documentado una erupción. El único sin registro es el Lanín, que es peligroso por otra serie de particularidades. Su conducto central está obturado y tiene una serie de pequeños centros volcánicos en la base. Esto es típico de volcanes que no pueden hacer emisiones por la boca central y por eso empiezan a resquebrajarse en la parte basal”, agregaba el profesional.
Lo cierto es que el coloso de 3776 metros pasará a ser uno de los volcanes monitoreados de manera permanente, tal cual lo hacen en la mayoría de los volcanes ubicados en jurisdicción chilena. Vale recordar que el Lanín es compartido por ambos países, estando la mayor parte de su estructura geológica inmerso en territorio argentino.
A partir del 2004, el volcán estuvo monitoreado por aparatos instalados por la UBA, en convenio con el municipio de Junín de los Andes, pero por diversas razones los equipos fueron retirados. Luego el Parque Nacional Lanín también tuvo incursión en el tema, junto con otras organizaciones, pero esta será la primera vez que se cuente con equipamiento que permita en tiempo real seguir la actividad del volcán.