
VIEDMA (AV)- Falta poco más de 10 días para el cambio de gobierno en Río Negro. Y aún así, "la ficha" no cayó en la conducción de algunos organismos. La desidia, lejos de despabilarse, se acentuó o en el mejor de los casos siguió en la misma dirección. Ni siquiera se atinó a aprovechar la inminencia del cambio y modificar la irregularidad en la que se manejaron en los últimos años.
Uno de los ejemplos es el ministerio de Turismo, donde hace tiempo la mira de la Justicia está puesta en el marco de varias investigaciones. Al parecer, son pocos los que cumplen con las funciones y varios los que cobran el sueldo sin siquiera aparecer por las oficinas. Este es el caso de la subsecretaria de Control y Gestión, Mónica Wehimester, quien hace más de un año que no se la ve edificio ministerial y en pocas ocasiones habría presentado certificación médica. Pero nunca dejó de cobrar por su función. Según trascendió desde hace casi un año residiría en La Plata donde cursaría la carrera de abogacía.
Este no sería el único ejemplo en el ministerio de Turismo. Entre el personal se encuentra una modelo que cobra un cargo de directora sin prestar servicios. En este caso la verían seguido pero sólo por aparecer en un programa de televisión por cable.
La lista sigue con una arquitecta del organismo quien al parecer concurre de vez en cuando y no porque no tenga nada para hacer, ya que el edificio de lo que fue la proveeduría de La Lobería y el camping hace tres años que esperan una propuesta para ser levantados luego del vendaval que los derribó.
Otros funcionarios dedicaron varios meses del año a la campaña gubernamental y fue cuando más se vieron. Luego del resultado desaparecieron como el caso del secretario Jorge Cerutti.
Y así, sin modificaciones, se continúa sin que las investigaciones judiciales ni la proximidad del cambio de gobierno hayan provocado una mínima intención de modificar conductas. Los viáticos -sobre todo de fines de semana largo- siguen sin alteraciones. Un futuro funcionario quedó sorprendido porque fue a buscar lo que hace tiempo se había pedido por escrito -como al resto de los organismos- y no sólo no tenía la respuesta sino que no encontró funcionario alguno.
En otras dependencias la situación no sería tan diferente pero en este parecen abundar los ejemplos desde las primeras líneas hasta las de menor categoría. Un chofer, por ejemplo, no cumpliría esta función en el ministerio por razones físicas pero trabajaría en forma alternada en una empresa de colectivos de larga distancia.