Hubo caos en la circulación de vehículos.
ATE prendió fogatas en la avenida Argentina.
NEUQUÉN (AN).- Los trabajadores del sistema público de salud realizaron ayer la protesta más dura desde que inició el conflicto salarial: al expresar su rechazo al aumento unilateral otorgado por el gobierno de Jorge Sapag, cortaron el tránsito durante la mañana en buena parte del centro de la capital provincial.
Hicieron fogatas con leña tapando la circulación en las vías que dan a la avenida Argentina, entre las calles Belgrano e Independencia. La medida provocó poco menos que el caos en el superpoblado parque automotor en la zona bancaria.
Esta mañana, desde las 7, ATE hará una asamblea interhospitalaria en el Centro Administrativo Ministerial (CAM) y de ese encuentro podría surgir nuevas medidas de fuerza para lo que resta de la semana. Hoy se cumple el segundo día del paro de 48 horas, lanzado como represalia por la suba que no dejó satisfechos a los empleados, que se terminará de pagar en febrero de 2012, luego de dos cuotas anteriores (mayo y septiembre próximo).
"Todavía estamos buscando a los responsables de firmar el acta acuerdo", ironizó el delegado Baltasar Álvarez, en alusión a la normativa que aplicó la recomposición y que en uno de sus considerandos dice que la decisión cuenta con el respaldo de los sindicatos, un día antes del anuncio.
La recomposición surgió luego de un mes de conflicto, que incluyó cortes parciales en la atención ambulatoria y la suspensión de cirugías programadas.
En el conflicto hubo otros sectores que ya se expresaron reclamando soluciones, a medida que el tono de las protestas y la falta de acuerdos tendieron a dar paso a los baches en el servicio.
Es el caso de los pacientes, principales perjudicados, que reclamaron en la calle una solución.
Y días atrás, con dos comunicados, la Iglesia, a través de la Pastoral Social del Obispado, responsabilizó en buena medida a la provincia, a la que le pidió que tome "con urgencia las decisiones que permitan restaurar de inmediato el derecho de todo ciudadano a la salud".
"En el sistema de salud necesitamos mejorar los ingresos y la transferencia de recursos para captar más personal", opinó el delegado Juan Millapán, ayer en medio de la protesta, aludiendo así a uno de los inconvenientes que volvió a reeditarse luego de que se creyera controlado: la ida de trabajadores a instituciones privadas ya que allí encuentran mejores condiciones salariales.
Este conflicto convive con otros que también tienen como principal destinatario al gobierno: uno de ellos es el de ATEN, que discutirá mañana la oferta oficial, y también el de Desarrollo Social y el de Rentas.
ATE prendió fogatas en la avenida Argentina.
NEUQUÉN (AN).- Los trabajadores del sistema público de salud realizaron ayer la protesta más dura desde que inició el conflicto salarial: al expresar su rechazo al aumento unilateral otorgado por el gobierno de Jorge Sapag, cortaron el tránsito durante la mañana en buena parte del centro de la capital provincial.
Hicieron fogatas con leña tapando la circulación en las vías que dan a la avenida Argentina, entre las calles Belgrano e Independencia. La medida provocó poco menos que el caos en el superpoblado parque automotor en la zona bancaria.
Esta mañana, desde las 7, ATE hará una asamblea interhospitalaria en el Centro Administrativo Ministerial (CAM) y de ese encuentro podría surgir nuevas medidas de fuerza para lo que resta de la semana. Hoy se cumple el segundo día del paro de 48 horas, lanzado como represalia por la suba que no dejó satisfechos a los empleados, que se terminará de pagar en febrero de 2012, luego de dos cuotas anteriores (mayo y septiembre próximo).
"Todavía estamos buscando a los responsables de firmar el acta acuerdo", ironizó el delegado Baltasar Álvarez, en alusión a la normativa que aplicó la recomposición y que en uno de sus considerandos dice que la decisión cuenta con el respaldo de los sindicatos, un día antes del anuncio.
La recomposición surgió luego de un mes de conflicto, que incluyó cortes parciales en la atención ambulatoria y la suspensión de cirugías programadas.
En el conflicto hubo otros sectores que ya se expresaron reclamando soluciones, a medida que el tono de las protestas y la falta de acuerdos tendieron a dar paso a los baches en el servicio.
Es el caso de los pacientes, principales perjudicados, que reclamaron en la calle una solución.
Y días atrás, con dos comunicados, la Iglesia, a través de la Pastoral Social del Obispado, responsabilizó en buena medida a la provincia, a la que le pidió que tome "con urgencia las decisiones que permitan restaurar de inmediato el derecho de todo ciudadano a la salud".
"En el sistema de salud necesitamos mejorar los ingresos y la transferencia de recursos para captar más personal", opinó el delegado Juan Millapán, ayer en medio de la protesta, aludiendo así a uno de los inconvenientes que volvió a reeditarse luego de que se creyera controlado: la ida de trabajadores a instituciones privadas ya que allí encuentran mejores condiciones salariales.
Este conflicto convive con otros que también tienen como principal destinatario al gobierno: uno de ellos es el de ATEN, que discutirá mañana la oferta oficial, y también el de Desarrollo Social y el de Rentas.