Breve Reseña

Esta emisora de radio nace por una necesidad de comunicación que tenía la zona de Piedra del Aguila y sus alrededores.
Por aquellos tiempos un soñador llamado Oscar Isaac Lillo emitía por primera vez un 13 de octubre de 1986, la radio experimental Piedra del Aguila en amplitud modulada.
El objetivo siempre fue servir a las instituciones, destacar los parajes, sus pobladores (que por diversos motivos aun continuan aislados en zonas rurales), el mensaje comunitario, el llamado urgente etc., son frases que se destacan en la actualidad.
Los pobladores de estos lugares siempre están espectantes de la información y diversos acontecimientos que se producen en la localidad, en el País y el exterior debido a la cambiente realidad actual.
Hoy el medio de comunicacion va actualizandose tecnologicamente de acuerdo a las innovaciones que se producen en el campo de la radiodifusión.

Año Nuevo Mapuche

El pueblo mapuche, al igual que la gran mayoría de los pueblos originarios del continente, desarrolló un gran conocimiento de la astrología y la astronomía. Logró interpretar los movimientos del sol y de los astros, así como también los cambios y alteraciones que estos producen en la naturaleza e inclusive en la personas. 

La comprensión y decodificación del idioma de la tierra y la naturaleza hizo posible que estos pueblos pudieran definir con exactitud el inicio de cada etapa, la finalización y el comienzo del nuevo año. 
We Xipantu o Nquillatún, que en mapuche significa año nuevo o salida del nuevo sol, es la celebración más importante de los pueblos originarios del hemisferio sur y coincide con el Inty Raimy (de la tradición Inca), en el que se elevan ruegos y agradecimientos a un mismo elemento, fundamental para la vida: el sol, fuente de sabiduría y renovación. 
La llegada del invierno, que en nuestro hemisferio es el 21 de junio, coincide con el solsticio de invierno, punto del calendario en el cual la tierra se aleja más del sol. Es el día más corto del año y su noche la más larga. Para los mapuches, este fenómeno natural marca la finalización del período de cosecha y el principio de una nueva época de siembra. Partiendo de una concepción cíclica del tiempo, el festejo tiene como protagonista al sol. 
Según la religión mapuche, el sol nace con la llegada del invierno, se vuelve joven y adulto en primavera, envejece durante nuestro verano y comienza a morir en otoño, cuando los árboles pierden sus hojas, los animales cambian su pelaje y otros fenómenos alteran a la naturaleza, incluidos los hombres. 
La ceremonia comienza la noche del 23 de junio, con familias enteras reunidas en torno a un gran fogón escuchando relatos de los más viejos del grupo y degustando platos típicos preparados especialmente para el acontecimiento. A las primeras horas de la madrugada del nuevo día, los integrantes de cada familia, ancianos, jóvenes y niños, abandonan el calor del fuego para acercarse al río, arroyo o vertiente más cercana para bañarse, en un rito de purificación, para estar limpios de cuerpo y espíritu antes de recibir al nuevo sol y, en consecuencia, al año nuevo.