Es por el corte de los empleados de Vialidad.
Los trabajadores piden un 45% de aumento
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ZAPALA (AZ).- El juez correccional Oscar Domínguez ordenó ayer la intimación y el posterior desalojo de los trabajadores viales que permanecían cortando la ruta nacional 22 en el acceso a Zapala, a la altura del paraje El Cristo. La medida, tomada a partir de una solicitud del fiscal Marcelo Jofré, fue elevada a las autoridades policiales de la ciudad que ayer, al cierre de esta edición, se disponían a notificar a los manifestantes.
Mientras tanto, los agentes de la Dirección Provincial de Vialidad se mantenían firmes en su decisión de extender el bloqueo por tiempo indeterminado. "Si viene la policía no vamos a confrontar pero seguiremos al costado de la ruta reclamando por nuestros derechos", anticipó el secretario del gremio vial neuquino, César Rodríguez.
Hasta ayer no se habían producido acercamientos oficiales entre el gobierno y los manifestantes para comenzar a discutir el planteo de recomposición salarial.
Los empleados viales reclaman un 45% de aumento aunque admiten que esa cifra es un punto de partida para comenzar a dialogar en busca de un acuerdo satisfactorio para ambas partes. "Las paritarias serían una buena herramienta para empezar a destrabar el conflicto pero debe entenderse que no podemos seguir esperando mientras nuestros compañeros pasan necesidades. Es fundamental que se acuerde un porcentaje de aumento para descomprimir un panorama que viene muy dificultoso", añadió el dirigente gremial zapalino quien además explicó que "todos los distritos del interior, salvo Chos Malal, están adheridos al reclamo".
Por su parte, fuentes judiciales confirmaron ayer que el juez Oscar Domínguez había dado luz verde a un pedido de la fiscalía para exigir el desalojo de la ruta. "Se presentó el escrito solicitando la medida que fue aceptada por el magistrado", expresó ayer una voz cercana al fiscal Marcelo Jofré.
Notificación
A última hora, las autoridades policiales debían notificar a los manifestantes de la decisión judicial. Según trascendió, la orden establecía un lapso de dos horas para abandonar el reclamo y caso contrario exigía la utilización de la fuerza pública para restablecer el tránsito.
Este martes, el piquete se mantuvo intermitente y cada dos horas los manifestantes levantaban la barrera para permitir el paso de los vehículos. No obstante, el tránsito liviano y algunos de carga menor pudieron utilizar los caminos alternativos que se encontraban en regular estado.