El hecho ocurrió en Zapala. El hombre fue denunciado por la madre de la adolescente y pareja suya. Cuando lo fueron a demorar, se disparó con un rifle en la boca. Habría dejado una carta.
Neuquén > Una adolescente de 13 años fue abusada por su padrastro, que luego de ser denunciado huyó hacia un campo y al quedar cercado por la Policía se disparó un tiro en la boca. Murió prácticamente en el acto y ayer le realizaban la autopsia en esta capital.
El hecho ocurrió en Zapala. Comenzó a desencadenarse el miércoles, cuando se cometió el abuso, y culminó ayer a primer hora, cuando el acusado se suicidó.
La identidad de los involucrados se mantiene en reserva por haber una menor de edad de por medio y por tratarse de un delito de abuso sexual.
Por la noche, la adolescente contó a su madre que había sido atacada. En forma inmediata, la mujer radicó la denuncia en la comisaría de la ciudad y desde allí la joven fue trasladada hacia el hospital local, donde le realizaron diversos exámenes.
Certificación
"Los médicos confirmaron que existió el abuso y que además la chica presentaba golpes en la cara", afirmó el director de Seguridad de Zapala, el comisario Mayor Rubén Contreras. "Se certificó que hubo una relación sexual no consentida y que la joven recibió golpes", coincidió otra fuente policial de la Comisaría del Menor.
Tras la denuncia, el padrastro de 42 años comenzó a ser buscado. Como tiene familia en la zona de Convunco Abajo, a 30 kilómetros de Zapala, se pidió a la Comisaría 34 de Mariano Moreno que rastrille la zona.
Minutos después de lanzar el alerta, en esta sede policial recibieron un llamado del acusado. El hombre preguntó si había alguna denuncia en su contra. Y luego pidió que no lo busquen porque se iba a suicidar, explicaron las fuentes.
En la camioneta
Una comitiva salió a buscarlo y lo encontraron arriba de su camioneta alrededor de las 7. El acusado bajó del rodado con un rifle y tras apuntarle a los efectivos, advirtió que si no lo dejaban pasar con la camioneta iba a dispararse.
Los efectivos accedieron al pedido y luego fueron tras él, hasta un campo en el que ingresó y que pertenecía a su familia. Allí, los uniformados lo cercaron una vez más. Pero esta vez, el hombre descendió de la camioneta y se disparó en la boca.
El arma que utilizó fue un rifle calibre 22 largo. Murió en el acto y no encontraron orificio de salida del proyectil, por lo que se especulaba que le había quedado alojado en la cabeza. Ayer el cuerpo fue trasladado hacia esta capital, donde le practicaban la autopsia.
Entre la ropa del hombre, la Policía habría encontrado una carta en la cual habría intentado explicar lo que pasó, según afirmaron las fuentes.
En principio, dos comisarías tomaron intervención en el hecho. La 22, que quedó a cargo de la investigación del suicidio, y la del Menor y la Mujer, responsable del abuso sexual.
El fiscal que interviene en la causa es Marcelo Jofré y es dirigida por el Juzgado de Instrucción de la localidad.