Municipales de Plottier tomaron el edificio comunal mientras el intendente se encontraba en su despacho.
Escenas de tensión se vivieron ayer en Plottier, en medio de una protesta. (MARIA ÍSABEL SANCHEZ) -
El mandatario había decidido revisar los pases a planta de la gestión Gallia. Ahora, suspendió la medida "para evitar enfrentamientos".
Escenas de tensión se vivieron ayer en Plottier, en medio de una protesta. (MARIA ÍSABEL SANCHEZ) -
El mandatario había decidido revisar los pases a planta de la gestión Gallia. Ahora, suspendió la medida "para evitar enfrentamientos".
Neuquén > El intendente de Plottier, Andrés Peressini, dio marcha atrás con el despido de 92 empleados municipales que pasaron a planta permanente sobre el final de la gestión de Sergio Gallia. Afirmó que tomó la decisión “para evitar un enfrentamiento entre vecinos”, en una tensa jornada.
Por la mañana, manifestantes nucleados en el gremio ATE habían ocupado el edificio comunal mientras Peressini se encontraba aún en su despacho. Simpatizantes del actual gobierno respondieron con la convocatoria a una marcha para las 19.30, que finalmente no se concretó.
A las 17, Peressini suscribió un acta de acuerdo con representantes de ATE Plottier en la que se comprometió a frenar temporalmente las cesantías a cambio del levantamiento de la protesta dentro del municipio. Además, las partes convinieron conformar una mesa de negociación para analizar en detalle cada uno de los 92 ingresos a planta permanente.
“Sabíamos que había una marcha en apoyo a la gestión y tomamos esta decisión para evitar enfrentamientos entre vecinos o cualquier situación de violencia”, explicó el intendente tras el acuerdo. Aclaró que el acta implica “una pausa en el conflicto” y admitió que entre los despedidos puede haber casos donde faltó información, “ya que hubo un vaciamento de los legajos antes de asumir”.
Grupos de presión
Sin embargo, denunció que entre los manifestantes había “grupos de presión que responden a personas que perdieron en la elección”, a los que calificó como “patoteros”. Se refirió puntualmente al ex intendente interino Lucio Parra.
“Recibimos un municipio devastado; nos dejaron solamente 534 pesos en la caja fuerte y una deuda salarial de 800 mil pesos que estamos tratando de cubrir”, detalló el intendente y aclaró que, no obstante, prevén cancelar el sueldo de noviembre y el aguinaldo en los próximos días.
Precisó que la mayoría de los empleados cesanteados pasó a planta “sin tener ningún antecedente de trabajo; por ejemplo, muchos ingresaron el 1º de septiembre, dos días antes de que se produjeran las elecciones”. En otros casos, agregó, “hay personas que estaban con contrato político y eran de la gestión” o eran agentes empleados mediante del artículo 14 del Estatuto Municipal, entre quienes se encuentran 22 afiliados a ATE.
Pilar Sagredo, secretaria general de ATE Plottier, evaluó que “se logró lo que queríamos, que era que los compañeros puedan ingresar a sus lugares de trabajo” y planteó que espera llegar a una solución definitiva al reclamo de reincorporación durante la mesa con el gobierno.
La referente gremial contó que la protesta se originó cuando los empleados fueron a trabajar y descubrieron que les habían retenido sus tarjetas de ingreso. También criticó al Ejecutivo por no cumplir con la notificación por anticipado de los despidos.