El vicepresidente es acusado de cohecho pasivo y negociaciones incompatibles. También están procesados Núñez Carmona, Vandenbroele, Resnick Brenner, Ciccone y Reinwick.
El juez federal Ariel Lijo procesó anoche al vicepresidente Amado Boudou y a otras cinco personas por "cohecho pasivo y negociaciones incompatibles", además de trabar embargo por 200.000 pesos en los bienes del alto funcionario, confirmó anoche el Centro de Información Judicial (CIJ).
Es la primera vez en la historia argentina que un funcionario de tan alto cargo es procesado judicialmente por un hecho de corrupción mientras ejerce aún el cargo.
El hecho, que encontró al vicepresidente de gira por Cuba, generó sin dudas un terremoto político en el gobierno y conmovió a todo el escenario político, en un momento delicado para el país, cuando se encuentra en una tensa negociación con los holdouts para evitar un default (ver páginas 2 y 3).
De hecho, anoche algunos referentes de la oposición como el radical Ernesto Sanz o Margarita Stolbizer, del GEN, salieron a pedir la renuncia o licencia del vicepresidente hasta que se termine el proceso judicial.
La medida decidida anoche por el magistrado alcanza también a José María Núñez Carmona, Alejandro Vandenbroele, Rafael Resnick Brenner, Guillermo Reinwick y Nicolás Ciccone.
En tanto, Lijo fijó una nueva fecha para tomar declaración indagatoria al vicepresidente para el 16 de julio, luego de un pedido del propio Boudou para ampliar su testimonio (ver recuadro). El juez fundamentó su decisión en un extenso fallo de 333 páginas, que fue difundido pasadas las 23 por el CIJ.
La decisión de Lijo señala textualmente en su parte resolutiva sobre el vicepresidente: "Decretar el procesamiento sin prisión preventiva de Amado Boudou, cuyas condiciones personales obran en autos, por considerarlo autor de los delitos de cohecho pasivo en concurso ideal con negociaciones incompatibles (arts. 45, 54, 256 y 265 del Código Penal y 306, 312 del Código Procesal Penal de la Nación)". En un segundo punto agrega: "Mandar a trabar embargo sobre los bienes y/o dinero del nombrado hasta cubrir la suma de doscientos mil pesos ($200.000), conforme lo dispuesto por los artículos 518 y 533 del Código Procesal Penal de la Nación".
El juez, entre otras cosas, consideró probada la relación entre Boudou y Vandenbroele, negada hasta ayer por el vicepresidente.
En resumen, Lijo consideró que el vicepresidente compró la empresa Ciccone Calcográfica a través del fondo The Old Fund cuando era ministro de Economía. Para ello contó con la colaboración de su socio José María Núñez Carmona y el abogado Alejandro Vandenbroele, quien actuó como testaferro del vicepresidente, consideró el juez.
Lijo asegura que la firma The Old Fund fue adquirida sólo con la finalidad de cobrar los más de 7 millones de pesos que pagó Formosa por el asesoramiento para la renegociación de la deuda provincial. Como pruebas, se detallan decenas de llamados entre Vandenbroele, Núñez Carmona y de éste con Boudou en los momentos clave de la operación de Formosa: cuando se depositó el cheque y cuando se extrajo el dinero de la cuenta.
Boudou, junto a Núñez Carmona, "habrían adquirido la empresa quebrada y monopólica Ciccone Calcográfica, mientras Boudou era Ministro de Economía, a través de la sociedad The Old Fund y de Alejandro Vandenbroele, con el fin último de contratar con el Estado nacional la impresión de billetes y documentación oficial", señala la resolución.
"Boudou, aprovechando su condición de funcionario público, y Núñez Carmona, habrían acordado con Nicolás y Héctor Ciccone, y Guillermo Reinwick la cesión del 70% de la empresa Ciccone Calcográfica a cambio de la realización de los actos necesarios para que la firma pudiera volver a operar y contratar con la Administración Pública", reza el texto.
Por esta razón, Vandenbroele y Núñez Carmona están acusados de "cohecho pasivo en concurso ideal", al igual que Boudou.
En el caso de Resnick Brenner, el cargo es por "negociaciones incompatibles" solamente.
El juez tomó como pruebas las reuniones en las que Boudou estuvo con los Ciccone y con Núñez Carmona, tanto en Telefe como en el restaurante I Fresh Market de Puerto Madero.
El amplio cruce de llamados telefónicos pone a Núñez Carmona en el centro de la negociación, ya que según el juez le daba instrucciones a Vandenbroele y se comunicaba con los Ciccone. De esta manera Boudou -según el juez- se quedó con Ciccone y comenzó el salvataje de la compañía para contratarla para imprimir papel moneda.
Por su parte Nicolás Ciccone, dueño de la empresa que imprime los billetes, y su yerno Guillermo Reinwick fueron procesados porque le cedieron el 70% de las acciones de la compañía a cambio del levantamiento de la quiebra de la empresa, la aprobación del plan de pagos de la AFIP y la futura contratación de la imprenta por parte del Estado. Por ello, estimó que les cabe el cargo de "cohecho activo", dijo Lijo en su auto de procesamiento.