El rodado despistó y antes de caer al agua, superó un desnivel de 20 metros de altura. Uno de los ocupantes fue rescatado en shock.
Una persona permanecía desaparecida y otra fue rescatada de las aguas del río Chimehuín, donde cayeron al dar varios tumbos con una camioneta que se salió de la Ruta 40, a unos ocho kilómetros al sur de esta ciudad, camino a la vecina San Martín de los Andes.
De momento se desconoce la identidad de las víctimas. Uno de los hombres fue auxiliado pero sólo atinó a balbucear: "me falta mi amigo Ariel", por lo que los rescatistas peinaban distintos tramos del río y esperaban el arribo de buzos.
La víctima fue de inmediato trasladada al hospital local, en medio de un intenso operativo que reunía dos ambulancias, dos dotaciones de Bomberos Voluntarios y personal de la Policía de Tránsito y Brigada Rural.
Al cierre de este despacho se sumaban profesionales de Prefectura basados en San Martín de los Andes, a la vez que se integraban pescadores con botes propios y funcionarios de Fauna.
La camioneta quedó sobre sus cuatro ruedas pero en medio del curso de agua. Estaba cubierta hasta el techo, por lo que no podía verse hacia su interior.
El siniestro ocurrió alrededor de las 17:20 de ayer, cuando, por causas aún ignoradas, una pickup doble cabina con cúpula derrapó a la altura de la curva conocida como "Los Santitos", a unos 8.000 metros de Junín de los Andes y en el kilómetro 2447 de la Ruta Nacional 40.
Según datos recogidos por "Río Negro" en el lugar, el vehículo dio al menos tres tumbos y se salió de la calzada para caer desde el terraplén hacia el desnivel que lleva al río, en un sitio de profundos pozones y de acceso habitual para pescadores.
Allí fue encontrada la primera víctima que, cono se indicó, estaba visiblemente conmocionada y sólo podía repetir el nombre "Ariel", en desesperado pedido de auxilio.
Los bomberos dispusieron de una camilla de rescate y sogas para alcanzar el sitio en el que estaba la víctima y por el que discurre el río.
El hombre, de unos 40 años, habría podido salir por sus propios medios mientras los responsables del operativo intentaban determinar si su acompañante había quedado en el interior totalmente inundado del automotor (al parecer, una Toyota) o si había logrado salir en otro sector del Chuimehuín.
Desde el lugar donde se produjo la caída, la camioneta fue arrastrada unos 250 metros río abajo, debido a las fuertes correntadas.
Decenas de personas seguían trabajando en procura de dar con el desaparecido. Conviene señalar que las rutas regionales presentan manchones de hielo debido a las bajas temperaturas de las últimas jornadas, con intensas heladas, aunque no parecía haber esas condiciones al momento de ocurrir el accidente y en el lugar de la cinta asfáltica donde se produjo la salida de vía.