
Una mujer tuvo un hijo, que al nacer pesó 2,9 kilos. Salvo que el pequeño algo grande, hasta ahí nada fuera de lo normal. El asunto, es que la mujer que dio a luz pesa nada menos que 240 kilos.
Victoria Lacatus, una rumana de 25 años, tuvo ayer su hijo por cesárea y los médicos afirman que fue un verdadero desafío debido a su enorme tamaño. “Fue difícil, porque ella necesita cuatro veces la anestesia de una persona común”, aseguró la médica Florin Costandache.
Mientras se repone en el hospital de Craiova, Rumania, Lacatus aseguró que no dudó en enfrentar al peligro: “Quería a este hijo con todo mi corazón, cualquiera fuera el sacrificio”.
Un vocero del hospital de emergencias de la Universidad de Bucarest relató que, durante los últimos meses, la mujer fue cuidadosamente monitoreada por especialistas que se encargaron de cuidar su salud prenatal.
Justamente, el obstetra Valeriu Horhoianu informó que al menos otras diez mujeres con sobrepeso dieron a luz en el Hospital de Bucarest, pero ninguna pesaba más de 160 kilos.