El gobernador y dijo que "el monólgo extorsivo" con él "no va".Neuquén > Frente a los reclamos salariales y a las medidas de fuerza que propician distintos sectores de la administración pública en la provincia, el gobernador Jorge Sapag reconoció ayer que se puede protestar pero aclaró que algunas acciones como paros, cortes de ruta y toma de edificios "tienen sus consecuencias en el bolsillo, cuando se trata de una huelga, o en tribunales, cuando se trata de un delito".
Al término de un acto en Casa de Gobierno donde se conocieron las ofertas para la primera central geotérmica de la provincia (ver página 8), Sapag se expresó dispuesto a asegurar el derecho a la educación haciendo valer las reglas de la democracia. "El que trabaja cobra, el que no trabaja no cobra", sostuvo. Y agregó que "estos no son tiempos de huelga sino de trabajo". El Estado, ratificó, no puede en este momento hacer frente a los reclamos salariales.
Algunos dirigentes sindicales, comentó, tienen una madurez extraordinaria y lo entienden pero otros intentan "doblarle el brazo al gobernador, cosa que no lo van a poder hacer porque primero está firme y segundo, no hay recursos. No es con caprichos o demagogia que se resuelven los problemas".
Sapag dijo que no tiene inconvenientes de reunirse con los gremios, pero aclaró que "el diálogo no es imposición ni significa estar dispuesto a decir que sí" a cualquier reclamo cuando las arcas financieras de la provincia no lo permiten. "El monólogo extorsivo conmigo no va. Si abrimos el diálogo que sea en un marco republicano", afirmó.
Expresó que entiende las peticiones de los dirigentes pero apuntó que cuando no se puede hay que mirar el conjunto. "Un aumento del 35 por ciento para los docentes sobre una masa salarial de 3.200.000 pesos implica una erogación de más de 1.000 millones de pesos por año. No sé de dónde imaginan los dirigentes sindicales que la provincia puede sacar esos recursos", enfatizó.
Diferencia con Nación
También señaló que si Nación acordó con los gremios docentes un aumento salarial del 23% escalonado, es ésta quien debe mandar los recursos. De cualquier manera, indicó que este "es el pacto educativo que tiene el gobierno nacional con algunas provincias y que Neuquén no está incluida".
"Con este aumento los docentes del país pasan a cobrar un piso de $1.740, cuando en la provincia es de 2 mil pesos. El gobierno nacional tiene mucho por recorrer todavía y no sé si alcanza a tener la misma cantidad de docentes que tenemos nosotros", expresó Sapag.
En alusión a la toma del Ministerio de Desarrollo Social, el mandatario provincial señaló que la Justicia ya está interviniendo y que para sentarse a dialogar los trabajadores que propician esta medida tienen que deponer su actitud, porque de lo contrario no va a haber diálogo.
"Insistimos con que las escuelas y los hospitales tienen que estar abiertos. Las rutas tienen que estar abiertas. Y en ese marco de convivencia pacífica tenemos que marchar en la construcción de esta democracia", evaluó.