El senador K lo admitió a días del robo de su BMW en el Gran Buenos Aires. Aunque insiste en que el país no tiene índices "de riesgo", según la ONU.
Buenos Aires (DPA) > El senador oficialista Aníbal Fernández admitió que fue "un error" hablar en otros tiempos de "sensación de inseguridad". Lo dijo a pocos días de haber sufrido un asalto y el robo de su auto BMW en el conurbano bonaerense.
"Me hago cargo: fue un error hablar de sensación de inseguridad, fue un error comentarlo", manifestó el legislador en una entrevista que publicó ayer al diario "Perfil".
"Yo venía con unas tartas que acababa de comprar para comer ese día y estaba escuchando música mientras me detenía en un semáforo. De pronto, delante de mí paró un coche. Otro, detrás. Y en algún momento alguien empezó a golpearme el vidrio. Yo no entendía qué quería decirme, hasta que vi el caño del revólver".
El ex jefe de Gabinete K continuó así su relato: "Mientras sacaba la palanca de cambios ya tenía a otro, también armado, del lado del volante. Abrí la puerta, me bajé y el que estaba a mi lado me metió la mano en el bolsillo para sacarme la llave. Pero se sabe que en estos coches no se pone llave. En cuanto vi un huequito en el tránsito crucé hacia la vereda. Eran pibes de unos 20 años y no dejaban de encañonarme. 'Llevate todo', le dije al más cercano, y cuando bajaron el arma me sentí más tranquilo", manifestó.
Al aludir a su conocida frase sobre la "sensación de inseguridad", el senador apuntó a otro matutino porteño. "Es un tema que el diario 'La Nación' ha tomado muchas veces. Según los recortes que he guardado desde el año 2008, es el título de la nota que dice 'sensación de inseguridad'. Yo no debería haberlo comentado porque parecería que uno utiliza eso para bajarle el tono a la discusión por la seguridad. Una estupidez. Bueno, el error está cometido, así que es inútil llorar sobre la leche derramada", señaló.
Igualmente, Fernández insistió en la idea de que la Argentina no tiene índices de inseguridad "de riesgo". "La realidad es que uno no tiene que contrastar el hecho formal, como estadística, al que está partido de dolor porque le han matado a un familiar. Pero en realidad, la Argentina, de acuerdo con las Naciones Unidas, no tiene un número que la ponga en una situación de riesgo", dijo.
Fernández se atrevió a declarar esto último en medio de un creciente nivel de inseguridad en Buenos Aires, sobre todo en el conurbano, con una seguidilla de asesinatos en los primeros meses del año. Algunos crímenes motivaron marchas de vecinos que reclamaban mayor seguridad y, en algunos casos, los reclamos derivaron en incidentes frente a comisarías e incluso a la remoción de agentes del orden.
La inseguridad es uno de los dos temas que vienen apareciendo al tope de las preocupaciones ciudadanas en las últimas encuestas de opinión.