Si bien el agua bajó en los últimos días, la costa permanece inundada.
Olga Cabeza
cabeza_olga@yahoo.com
NEUQUÉN
A dos semanas de haber llegado a su caudal máximo, el río Limay sigue cubriendo balnearios y riberas neuquinas.
La persistencia de las lluvias en las tres cuencas obligó a la AIC a mantener un nivel medio de erogaciones. Si bien ya se bajó el máximo permitido de 1290 metros cúbicos por segundo, en la actualidad el caudal alcanza los 900 y se mantendrá mientras persista la humedad.
Las costas neuquinas se encuentran todavía cubiertas por la crecida del río Limay, que el pasado 30 de julio llegó a su máximo nivel, hecho que no ocurría desde septiembre de 2013. A poco más de dos semanas, el nivel del río baja, pero toda la franja costera sigue prácticamente cubierta.
El balneario Sandra Canale, también conocido como Gatica, es en el que mejor puede apreciarse el efecto de la crecida. El agua todavía se encuentra cubriendo gran parte del predio e instalaciones. Los vecinos han dejado de pasear o hacer ejercicio allí y sólo puede verse algún auto dando vueltas. El aire es frío y húmedo, mucho más que a pocas cuadras de distancia.
El balneario municipal, en Linares al fondo, es otra de las postales que dejó la crecida. El nivel del agua baja lentamente y en sus escalinatas pueden verse las marcas de tono oscuro, característico de la humedad, producto de haber estado cubierto por el agua durante varios días. El suelo todavía permanece fangoso y el lugar es desolador. No hay vecino que camine por el lugar, aun en invierno, al igual que en el Sandra Canale.
Los vecinos del municipal aseguran que el nivel del agua ha bajado. “Poco, pero bajó”, dijeron. Aseguraron que no se preocuparon por la rápida crecida en el nivel del agua porque había sido ampliamente anunciado por todos los medios de comunicación. “Ya sabíamos que iba a subir, así que no dejamos que los chicos vengan a jugar solos, por precaución más que nada”, dijo Cristina, una vecina de la zona.
En la zona sólo se ve movimiento los días más soleados y en las primeras horas de la tarde, ya que hay mucha gente que aprovecha el espacio para caminar. No obstante, lo hacen lejos de la costa, debido a que en muchos lugares el agua se retiró pero dejó mucho barro.
“Hay que esperar a la primavera para que comience a secar un poco porque ahora está muy difícil. Además está muy frío”, comentó un hombre que suele concurrir a la costa para hacer ejercicios y para pasear a su mascota.
Alerta anticipada
La AIC había anunciado que a partir del 25 de julio los caudales de los ríos Limay, Neuquén y Negro comenzaron a recibir un mayor afluente de agua proveniente de la represa Arroyito. Por ese motivo, se avisó que buena parte de la línea de ribera quedaría bajo agua. La decisión del organismo se fundamentó en las lluvias pronosticadas en la región cordillerana, específicamente en las tres cuencas. Por eso se indicó que desde Arroyito iban a erogar un mayor caudal de agua, situación coordinada por la AIC y Cammesa.
El jueves 30, el río Limay alcanzó su caudal máximo de 1290 metros cúbicos por segundo hecho que no se da desde septiembre del 2013. En aquella oportunidad se vivió una situación similar con los efectos de la crecida. En lugares del barrio Confluencia los vecinos no quisieron dejar sus viviendas, ubicadas a la orilla del Limay, por temor a que les robaran sus pertenencias.
TRES PREGUNTAS A...
Elías Sapag
Titular de Emhidro
1. ¿A qué se debe que siga la zona del río con muchísima agua?
No es que esté inundado, es el momento. Hoy, el río Limay está en 900 y seguirá así porque sigue lloviendo y porque hay nieve.
2. ¿Esto significa que se seguirá erogando?
Sí, porque tenemos agua que estamos guardando y, a su vez, estamos reteniendo las pequeñas crecidas. En Piedra del Águila está entrando en el orden de los 1200 a 1440 metros cúbicos.
3. ¿Y cómo ve la situación de cara al futuro?
Esto se va a mantener en la medida en que la humedad de agosto persista. Creemos que en la necesidad de regular las crecidas y de guardar para afrontar la primavera, el verano y la necesidad de los usuarios lo requieran vamos a seguir así.
Abundante agua para el riego y el próximo verano
NEUQUÉN
Es un “año hídrico” importante en términos técnicos. Tanto la gran cantidad de nieve que sigue cayendo en la cordillera como las fuertes lluvias que se registran en las tres cuencas hacen que las represas se encuentren con una abundante cantidad de agua.
Si bien pudo haber sido un poco traumático el hecho de haber erogado el máximo permitido para el río Limay, es importante para la región mantener esa cantidad de reservas, especialmente para la temporada de riego que comenzará en los próximos días y para afrontar la primavera y especialmente el verano.
La región atravesó graves problemas de sequías y años hídricos débiles, pero el clima volvió a cambiar y nuevamente la naturaleza permitirá no tener sobresaltos durante los próximos meses.
Mucho frío
El pronóstico del tiempo elaborado por la AIC estima que se mantendrán muy bajas temperaturas en gran parte de la provincia. En efecto, se esperan hasta 11 grados bajo cero el próximo domingo en el norte de la provincia, mientras que en el centro la mínima rondará los dos grados bajo cero.
En el sur del territorio provincial se esperan lluvias débiles a moderadas y también abundante nieve, de acuerdo con el parte elaborado por el organismo interjurisdiccional.