Ocurrió por la tarde en el paraje Pilolil, a 60 kilómetros de esta localidad.
Tres presuntos cazadores furtivos, uno de los cuales se tiroteó con efectivos de la Policía, fueron detenidos ayer tras una intensa persecución a unos 60 km de esta ciudad, en el paraje Pilolil. Los acompañaba un menor de edad que, cumplidos los trámites legales, fue entregado a sus padres.
El hecho ocurrió por la tarde, cuando personal de un campo ubicado en la zona de pasturas camino a Aluminé advirtió la sospechosa presencia de extraños en el predio. Mediante una comunicación por radio alertaron a la Brigada Rural y a la Policía de Tránsito de Junín de los Andes, a cargo del comisario Peucón, quien de inmediato despachó una comisión hacia la zona.
Los agentes llegaron al puesto y se encontraron con los recorredores contratados por la estancia, quienes fueron guiando a los policías hasta el lugar donde habían avistado a los extraños. Allí detectaron a cuatro personas que se movilizaban a pie y comenzaron la aproximación hasta que, a prudente distancia, les dieron la voz de alto.
Fue entonces cuando, según se pudo saber de fuentes extraoficiales, uno de ellos se dio a la fuga, disparando un arma de fuego hacia los policías. Un uniformado respondió el fuego mientras otros intentaban cercar al prófugo. La maniobra dio resultado cuando uno de los policías logró reducir al sospechoso.
Luego se determinó que eran tres jóvenes de 30, 20 y 18 años, todos armados con carabinas calibre 22. Los acompañaba un chico de 14. Según las fuentes, serían conocedores de la zona, radicados en parajes cercanos. Todos fueron trasladados hasta Junín y con intervención de Fiscalía se procedió al secuestro de las armas y proyectiles.