Las víctimas buscaban un perro en una estancia. Los cuatreros les dispararon varias veces y de cerca.
Dos personas que recorrían una estancia próxima al aeropuerto Chapelco fueron tiroteadas por cazadores furtivos, en un peligroso episodio que agudizó los frecuentes hechos de cuatrerismo que se registran en la zona. "Esto pasa de la raya. Siempre hay casos de furtivismo, pero una cosa es que te maten un chancho o una vaca y otra es que le tiren a la gente", dijo a este diario el propietario del predio, Norberto Estévez.
El campo conocido como Nahuel Malal, de unas 240 hectáreas, está ubicado sobre el kilómetro 2.231 de la Ruta Nacional 40. Estévez presentó la denuncia ante las autoridades policiales de la Comisaría 43 del barrio El Arenal, con jurisdicción sobre la zona rural que se extiende al este del casco histórico por la Ruta Nacional 40, camino a la vecina ciudad de Junín de los Andes.
Consultado por "Río Negro", relató que el pasado domingo, alrededor de las 18, el peón Fabián Melihual y un amigo de la familia, Lucas Rodríguez, de San Martín de los Andes, quien se hallaba circunstancialmente en el lugar, salieron en búsqueda de un perro que se había extraviado.
Cuando llegaron al límite con el campo vecino, en un sitio distante a unos 400 metros del casco de la estancia, dos sujeto aparecieron de la nada y comenzaron a dispararles. Los tiros silbaron cerca de los pies de uno de ellos. Según el testimonio, los tirotearon con armas largas desde unos 10 a 12 metros y contaron no menos de cinco balazos. Ante el ataque, las víctimas gritaron a viva voz que estaban desarmados y que sólo buscaban un perro, pero los agresores hicieron caso omiso del desesperado llamado.
Estévez dijo que "estos personajes estaban invadiendo propiedad privada y estaban en actitud de furtivismo o cuatrerismo, que son situaciones similares a otras que se suceden con frecuencia también con disparos, pero nunca a tan corta distancia. Afortunadamente ninguna de nuestras personas han salido heridas", subrayó.
Estévez destacó el accionar policial porque "en pocos minutos llegaron cuatro patrulleros, algunos de la Dirección de Seguridad de Junín de los Andes y otros con efectivos de las comisarías 43 y 23 de San Martín de los Andes". El ruralista enfatizó que "los policías estuvieron en comunicación telefónica constantemente, iniciando el operativo cerrojo en toda la zona en búsqueda de estas personas que hicieron los disparos".
Pero aclaró que para entonces ya había oscurecido, por lo que no hubo posibilidad de dar de inmediato con los atacantes. Estévez dijo que, por la rapidez y violencia del hecho, las víctimas no lograron identificar a sus agresores, aunque el peón alcanzó a hacer una descripción de las ropas que llevaba uno de ellos. Como se apuntó, los casos de furtivismo y cuatrerismo son frecuentes en esta región, donde se producen matanzas de cérvidos y jabalíes, vacunos, yeguarizos y lanares. Las autoridades realizan regulares recorridos de patrulla y decomisos, pero la actividad es creciente, muchas veces asociada al comercio clandestino de carne.