Un hecho mínimo, por una botella de cerveza, desencadenó después un ataque contra la sede policial. Hubo siete policías heridos, según se informó. Esa Comisaría ya pasó por una verdadera guerra hace dos años.
Un grupo de la comunidad boliviana que estaba en plena celebración, y otro grupo de chicos que se hacen llamar “Los muchachos del puente”, se enfrentaron el domingo a la noche en el barrio Confluencia, pero después terminaron unidos para apedrear durante horas la Comisaría 19. Siete policías recibieron heridas, y varios automóviles –incluidos particulares de los policías que allí trabajan- dañados, por la intensa pedrea.
No es la primera vez que sucede, pero lo del barrio Confluencia ya supera lo alarmante, para entrar directamente en lo muy preocupante. El hecho que provocó el último escarceo fue mínimo, según le contó el subcomisario Román Gómez este lunes al periodista Francisco Casado, de LU5: el arrebato de una botella de cerveza.
La botella en cuestión la traía hacia la fiesta boliviana una mujer de esta comunidad, cada vez más numerosa en el Alto Valle, cuando fue interceptada y maltratada por los “muchachos del puente”, una especie de patota que lleva ese nombre porque su lugar de reunión es el puente de las calles Paimún y Tres Arroyos.
Según se informó, la policía actuó en ese incidente mínimo, tan cotidiano que no hubo siquiera demorados. Pero la sola presencia policial parece que enerva a sectores del barrio donde hace solo un par de años (también en mediados de octubre, pero de 2008) hubo violentos enfrentamientos como consecuencia de una usurpación de tierras.
Fue así que los dos bandos que inicialmente se habían enfrentado, se unieron para atacar la Comisaría 19, que es a esta altura un emblema del enemigo, más que un lugar destinado a prevenir y combatir el delito. Desde las 22:30 hasta pasadas las 5 de la madrugada, los alegres “combatientes” se dedicaron a apedrear sin pausa al edificio policial.
“Siete policías resultaron heridos, y varios automóviles dañados”, refirió el subcomisario Gómez.
Un grupo de la comunidad boliviana que estaba en plena celebración, y otro grupo de chicos que se hacen llamar “Los muchachos del puente”, se enfrentaron el domingo a la noche en el barrio Confluencia, pero después terminaron unidos para apedrear durante horas la Comisaría 19. Siete policías recibieron heridas, y varios automóviles –incluidos particulares de los policías que allí trabajan- dañados, por la intensa pedrea.
No es la primera vez que sucede, pero lo del barrio Confluencia ya supera lo alarmante, para entrar directamente en lo muy preocupante. El hecho que provocó el último escarceo fue mínimo, según le contó el subcomisario Román Gómez este lunes al periodista Francisco Casado, de LU5: el arrebato de una botella de cerveza.
La botella en cuestión la traía hacia la fiesta boliviana una mujer de esta comunidad, cada vez más numerosa en el Alto Valle, cuando fue interceptada y maltratada por los “muchachos del puente”, una especie de patota que lleva ese nombre porque su lugar de reunión es el puente de las calles Paimún y Tres Arroyos.
Según se informó, la policía actuó en ese incidente mínimo, tan cotidiano que no hubo siquiera demorados. Pero la sola presencia policial parece que enerva a sectores del barrio donde hace solo un par de años (también en mediados de octubre, pero de 2008) hubo violentos enfrentamientos como consecuencia de una usurpación de tierras.
Fue así que los dos bandos que inicialmente se habían enfrentado, se unieron para atacar la Comisaría 19, que es a esta altura un emblema del enemigo, más que un lugar destinado a prevenir y combatir el delito. Desde las 22:30 hasta pasadas las 5 de la madrugada, los alegres “combatientes” se dedicaron a apedrear sin pausa al edificio policial.
“Siete policías resultaron heridos, y varios automóviles dañados”, refirió el subcomisario Gómez.