BUENOS AIRES.- El gobierno de Chile recurrió ayer a la vía diplomática para expresar su rechazo a la decisión del Ejecutivo nacional de otorgarle la condición de refugiado político a Galvarino Apablaza Guerra e insistió con la extradición del ciudadano del país trasandino para evitar profundizar las fricciones entre ambos países.
El malestar, en lenguaje diplomático, fue manifestado por el presidente Sebastián Piñera. Tras asegurar que la decisión de la Argentina "está contribuyendo a una impunidad que no le hace bien ni a la justicia ni al país", el mandatario trasandino citó al embajador argentino en Santiago, Ginés González García, para entregarle una nota diplomática para expresar la posición del gobierno chileno al respecto.
Según confirmaron voceros de la Cancillería de Chile, el ministro de Relaciones Exteriores, Alfredo Moreno chileno, mantuvo una reunión durante "media hora" con Ginés González García, a quien le reiteró "la postura del gobierno chileno" de reclamar "la extradición porque se trata de un hecho terrorista".
Minutos después de las 19 (hora chilena), el funcionario argentino se acercó a la sede de la Cancillería para escuchar el reclamo del país trasandino.
La reunión, a la que las fuentes la calificaron como "privada", se prolongó por "media hora" y sólo participaron Moreno y González García. El representante del gobierno de Cristina Fernández se retiró del encuentro "sin realizar declaraciones", indicaron voceros de la Cancillería chilena.
El ex guerrillero chileno Apablaza está acusado de asesinar al senador Jaime Guzmán y secuestrar al empresario periodístico Christian Edwards del Río, en 1991. La Corte Suprema argentina recomendó la extradición a Chile de Apablaza, miembro del Frente Patriótico Manuel Rodríguez. No obstante, tras una recomendación favorable al asilo político de la Comisión Nacional para Refugiados, el Gobierno otorgó el status de refugiado político al ciudadano chileno.
Esta determinación provocó el rechazo de senadores chilenos y hasta del propio Piñera quien dejó de manifiesto que la decisión argentina afecta la relación bilateral y provoca "impunidad" en torno a Apablaza.
Desde el Ejecutivo nacional, el canciller argentino Héctor Timerman desestimó ayer un posible riesgo de las relaciones bilaterales.
"No lo creo", fue la respuesta del ministro al ser consultado sobre si la decisión de la Conare de aceptar la solicitud de Apablaza traerá problemas con Chile.
En declaraciones a radio La Red, Timerman también calificó como "una payasada" las declaraciones de legisladores chilenos aunque después, por la red social Twitter, desestimó sus críticas.
"Jamás llamé payasadas los dichos de políticos chilenos. Si creo que decir que le tenemos miedo a (la titular de Madres de Plaza de Mayo) Hebe Bonafini es una payasada", escribió. (DyN)
El malestar, en lenguaje diplomático, fue manifestado por el presidente Sebastián Piñera. Tras asegurar que la decisión de la Argentina "está contribuyendo a una impunidad que no le hace bien ni a la justicia ni al país", el mandatario trasandino citó al embajador argentino en Santiago, Ginés González García, para entregarle una nota diplomática para expresar la posición del gobierno chileno al respecto.
Según confirmaron voceros de la Cancillería de Chile, el ministro de Relaciones Exteriores, Alfredo Moreno chileno, mantuvo una reunión durante "media hora" con Ginés González García, a quien le reiteró "la postura del gobierno chileno" de reclamar "la extradición porque se trata de un hecho terrorista".
Minutos después de las 19 (hora chilena), el funcionario argentino se acercó a la sede de la Cancillería para escuchar el reclamo del país trasandino.
La reunión, a la que las fuentes la calificaron como "privada", se prolongó por "media hora" y sólo participaron Moreno y González García. El representante del gobierno de Cristina Fernández se retiró del encuentro "sin realizar declaraciones", indicaron voceros de la Cancillería chilena.
El ex guerrillero chileno Apablaza está acusado de asesinar al senador Jaime Guzmán y secuestrar al empresario periodístico Christian Edwards del Río, en 1991. La Corte Suprema argentina recomendó la extradición a Chile de Apablaza, miembro del Frente Patriótico Manuel Rodríguez. No obstante, tras una recomendación favorable al asilo político de la Comisión Nacional para Refugiados, el Gobierno otorgó el status de refugiado político al ciudadano chileno.
Esta determinación provocó el rechazo de senadores chilenos y hasta del propio Piñera quien dejó de manifiesto que la decisión argentina afecta la relación bilateral y provoca "impunidad" en torno a Apablaza.
Desde el Ejecutivo nacional, el canciller argentino Héctor Timerman desestimó ayer un posible riesgo de las relaciones bilaterales.
"No lo creo", fue la respuesta del ministro al ser consultado sobre si la decisión de la Conare de aceptar la solicitud de Apablaza traerá problemas con Chile.
En declaraciones a radio La Red, Timerman también calificó como "una payasada" las declaraciones de legisladores chilenos aunque después, por la red social Twitter, desestimó sus críticas.
"Jamás llamé payasadas los dichos de políticos chilenos. Si creo que decir que le tenemos miedo a (la titular de Madres de Plaza de Mayo) Hebe Bonafini es una payasada", escribió. (DyN)