Un niño de tres años fue rescatado cuando caminaba, solo, por la calle, en la helada madrugada del miércoles 24.
El niño, de apenas tres años, caminaba, solo y con poca ropa, por la helada madrugada neuquina del miércoles 24 de junio. Lloraba y caminaba. La imagen del desamparo, a metros de la multitrocha de la ruta 22, cerca del Casino Magic, donde la vida transcurría alegre y rutinariamente.
El pibe caminó hasta que el conductor de un auto lo vio, y tuvo el suficiente tino como para detenerse y ver qué pasada. Vio que el nene estaba solo. Lo subió al auto y lo llevó a la comisaría más cercana: la 44, de Valentina Sur.
Eran las cinco de la mañana. La temperatura oscilaba en los 2 grados bajo cero.Recién a las 7 de la mañana, según las primeras informaciones publicadas al respecto, la policía consiguió ubicar a un familiar.
El padre, dicen, se presentó –bastante borracho- en la comisaría. Había comido un asado con amigos, y dejado al chico solo, en su vivienda de la calle J.J.Lastra.
Según informó prensa del ministerio público de la defensa, el niño fue trasladado a un hogar de admisión de menores, dependiente del ministerio de Desarrollo Social de la provincia.
"El jueves por la mañana se entrevistará a familiares para tomar un conocimiento más acabado del cuadro de situación, y sobre la base de eso se solicitarán las medidas que se consideren pertinentes y más apropiadas para garantizar el resguardo de los derechos del niño".
En el caso, una postal de una realidad incomprensible pero furiosamente presente, interviene la Defensoría de los derechos del Niño y el Adolescente N°1 de Neuquén. Pero es posible que nada solucione este tipo de realidades, más que la educación y la sensibilización que ella otorga a la sociedad.Mientras, como decía Armando Tejada Gómez, "qué han hecho de la vida,/ dónde pondré la sangre,/qué haré con mi semilla/ si hay un niño en la calle” (Rubén Boggi).
Fuente: Mejor Informado