Reúnen firmas para que Nación adquiera las aeronaves. Cristina había anunciado 26 unidades, pero nunca llegaron.
EL BOLSÓN (AEB).- En la provincia del Chubut, y más reciente en ciudades como Bariloche, El Bolsón, San Martín de los Andes y Villa La Angostura, se están juntando firmas para pedir por "la compra de aviones hidrantes -tipo Súper Scooper- para combatir incendios forestales".
El detonante fueron los siniestros que ya consumieron 40.000 hectáreas en la Comarca Andina, donde además afloraron conflictos por el uso de los aeródromos de Cholila y El Maitén, sumado a la contratación -por parte del Servicio Nacional de Manejo del Fuego- de aeronaves "de uso agrícola que también pueden ser adaptadas para la lucha contra incendios", conforme la presencia en la región de 6 Dromader (dromedario) con capacidad de recarga en tierra de 2.500 litros de agua.
En tal sentido se recordó que "el 28 de diciembre de 2012, al presentar la compra de 26 aviones hidrantes por 57 millones de pesos, la presidenta Cristina Kirchner dijo: 'A los que quieren provocar incendios, acá tienen una brigadista'". Sin embargo, estos recursos no aparecieron en el contexto del incendio "más grande del siglo", en referencia al que está aconteciendo en Cholila.
Incluso, antes de ser despedido por "inoperante", el exjefe del Servicio Nacional de Manejo del Fuego, Jorge Barrionuevo, había asegurado que dicha flota estaba "operativa". Finalmente, la realidad se supo el último fin de semana: "Los 26 aviones hidrantes nunca se compraron", según revelaron desde la Secretaría de Medio Ambiente.
Aquella licitación de hace tres años "fue para alquilar los aviones, que es la opción más barata antes que la adquisición y posterior mantenimiento de semejante número de aeronaves. Se contrató su servicio a privados y se los repartió en las distintas regiones del país", graficaron.
La gestión "para alcanzar las 30.000 firmas y pedir que el Estado nacional compre aviones hidrantes necesarios para combatir incendios forestales como los que arrasaron decenas de miles de hectáreas en Chubut y Río Negro" fue publicada en el sitio Change.org y justifica que "es absolutamente necesario contar con herramientas idóneas para combatirlos y que estén exclusivamente disponibles para el uso local ante cualquier eventualidad. En este contexto los aviones hidrantes tienen una utilidad preponderante".
Felipe Ivandic, con 42 años de experiencia en incendios forestales y gestor, entre otros, del Plan Nacional de Manejo del Fuego, opinó ayer al respecto que "en determinadas circunstancias, sirven todos, pero en otras no sirve ninguno".
Desde su óptica, "estos aviones canadienses (el Bombardier 415) son quizás los mejores del mundo porque son fabricados específicamente para combatir incendios forestales -aunque también son multipropósito-, son anfibios y pueden operar además en un aeropuerto (pero con una pista consolidada). Maniobran tranquilamente en cualquier espejo de agua que tenga más de 1,80 metros de profundidad, con una capacidad de almacenamiento de unos 6.500 litros", indicó.
Recordó que "están en uso en España y en otros países. Es muy moderno, incluso permite usar retardantes a través de un mezclador computarizado, pero cada uno vale en el orden de los 24 millones de euros".