
Richard Heene (48 años) y su esposa Mayumi pensarán seriamente antes de inventar otra historia con sus hijos. El fue sentenciado a 90 días de cárcel y su esposa Mayumi –de origen japonés, cumplirá 20 días en prisión cuando el marido complete la condena. Se turnarán para que los chicos no estén solos.
El encargado de sentenciarlos fue el juez Stephen Schapanski, de la corte de Fort Collins, en las afueras de Denver (noroeste de Estados Unidos). Heene comenzará a cumplir su condena en enero.
En la sentencia, el magistrado consideró que "en términos simples, fue una broma elaborada que fue tramada por el señor y la señora Heene". "Este caso es sobre decepción y explotación, explotación de los niños Heene, explotación de los medios, explotación de los sentimientos de la gente. Y todo fue por dinero, hacer dinero", agregó.
Bajo los términos de la sentencia, Richard Heene servirá 30 días en la cárcel y el resto del tiempo de la condena el padre podrá salir a trabajar de día, pero deberá volver todas las noches a dormir a una celda.
Heene se declaró culpable de haber proporcionado una información falsa a las autoridades y de haber intentado influenciar a un servidor público. Además el padre de familia estará cuatro años en libertad provisional y se le prohibió realizar cualquier actividad que le permita obtener lucros de la broma realizada en octubre.
Antes de que el juez diera a conocer la sentencia, Heene expresó sus disculpas en una breve declaración en el tribunal. "Quiero reiterar que estoy muy, muy apenado y quiero disculparme con todos los rescatistas y la gente que estuvo implicada en esta comunidad. Eso es todo", dijo.
Mientras tanto, Mayumi Heene fue sentenciada a 20 días de cárcel tras admitir haber dado un falso testimonio a las autoridades. No obstante, la madre de los tres nenes ingresará en una celda cuando su esposo sea liberado. La mujer también podrá cumplir la condena a medio tiempo, dos días a la semana, con el fin de poder continuar con su trabajo.
El fiscal Andrew Lewis dijo en la audiencia que la broma requirió el uso de cientos de trabajadores de las agencias federales de seguridad y por eso la factura del caso asciende a 47.000 dólares y podría aumentar.
Los Heene tendrán que pagar esta deuda pero los términos para restituir este monto por parte de este matrimonio sin trabajos fijos y con salarios bajos se darán a conocer más adelante.
Lewis instó a la corte a emitir una pena con prisión para disuadir a otros aspirantes a la fama fácil de abstenerse de realizar bromas similares en el futuro."El señor Heene hizo perder una gran cantidad de trabajo y un montón de dinero solo para ganar publicidad para sí mismo", sostuvo.
El 15 de octubre pasado, la pareja armó una farsa haciéndole creer a la policía que su hijo de 6 años había subido a un globo aerostático casero y que por error el aparato se soltó. El globo surcó el cielo de Denver durante varios minutos angustiantes, seguidos
por grupos de rescate. Las cadenas lo transmitieron en todo el mundo. Finalmente el matrimonio admitió que era una mentira.
