Lo hizo por el programa al que adhirió en 2010 y que se firma cada tres meses.

Del acto, que fue encabezado por la presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, participaron otros mandatarios provinciales, como Alberto Weretilnek (Río Negro), que había sido excluido en el anterior convenio y que ahora recompuso relaciones con Nación, a través de su cercanía con Daniel Scioli.
Para Neuquén, la continuidad del programa de refinanciación de pasivos con el gobierno nacional trae cierto alivio para la tesorería provincial, que para este año había estimado en su presupuesto más recursos de los que en realidad están ingresando, fundamentalmente por regalías y Coparticipación. “Lo de hoy (por ayer) ratifica la vigencia de lo acordado en 2010”, señaló Sapag.
El plan, que fue lanzado en ese año, implicó que las provincias suscriptas al acuerdo no pagarán amortizaciones de capital ni intereses, además de pautar la cancelar de sus obligaciones en un plazo de 20 años, a una tasa de interés del seis por ciento anual en pesos, lo que implica una quita efectiva del 40% de las deudas contraídas.
La inclusión al convenio -previa renuncia a viejos litigios con Nación- le permitirá a Neuquén terminar pagando, a valores presentes, alrededor de 500 millones de pesos de un pasivo original de $1.700 millones.