No hubo heridos. El conductor y su acompañante se salvaron de milagro.
Una piedra que rodó por faldeos de cuesta Rinconada casi genera una
tragedia, al impactar sobre un vehículo que circulaba por Ruta 40. Tras
el impacto, lo desplazó hasta el guardarail que protege la salida de vía
sobre un precipicio de 80 metros. Esa contención evitó que el automóvil
y sus ocupantes cayeran al vacío.
El accidente se produjo a
la altura del kilómetro 2232 de la Ruta Nacional 40, a unos 40
kilómetros de Junín de los Andes, alrededor de las 16,15 de este martes.
En
esta ocasión, una pesada roca de unos 70 centímetros de diámetro se
desprendió de la ladera hacia el pavimento, hasta dar contra una de las
ruedas de un VW Fox, en el que viajaban dos turistas, oriundos de Buenos
Aires.