La sequía histórica que se padece en la cordillera es uno de los motivos. Este año no hubo grandes nevadas ni tampoco lluvias intensas en la alta cuenca.
Debajo del puente de la calle Río Negro se podía observar ayer la formación de una isla en el brazo que rodea la Isla 132.
Neuquén -Se puede ver el lecho o cruzar caminando de una orilla a la otra. El Limay tiene uno de los caudales más bajos del último tiempo y dos son los principales motivos. Uno, la sequía que cumplió una década en la cordillera y el segundo, la ola de frío en la zona central del país, durante la cual hubo más generación eléctrica, se turbinó más agua y bajaron los embalses.
En los balnearios, las playas se volvieron anchas y el espigón del balneario Río Grande que, generalmente está sumergido, quedó desnudo sobre el agua. En el balneario Albino Cotro el brazo del río que rodea la isla 132 se convirtió en estanque y casi nada de agua corre en medio del lecho entre la lama y la basura. Frente a los clubes está igual de vacío y si no nieva o llueve en la cordillera se complicará recuperar el buen caudal.
Las nevadas en la cordillera, existieron pero no continuaron y el deshielo todavía no comenzó. Hace unas semanas, el presidente de la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC), Elías Sapag dijo a “Río Negro” que existe en lo inmediato una situación de riesgo, pero se están padeciendo las consecuencias de un año seco.
“Mientras no tengamos un año extraseco estaremos en condiciones de poder garantizar el abastecimiento”, dijo el presidente de la AIC, pero agregó que cree que de no mejorar estas condiciones “apenas” alcanzará el agua para llegar a marzo.
Para poner un ejemplo, en la presa de Arroyito el lunes dejaban pasar 250 m³ por segundo, cuando el 12 de junio dejaban pasar 900 m³. En El Chañar, sobre el Neuquén, el lunes se dejó pasar 66m³ por segundo y el 12 de junio, dejó pasar 29m³.
Siempre es importante para hacer crecer los caudales, la cantidad de agua proveniente de las precipitaciones en la alta cuenca. Según el informe de la AIC de junio, comparado con los valores medios la precipitación del mes resultó con déficit en las tres cuencas, con un valor del 94% en las cuencas de los ríos Limay-Traful y Collón Cura y 93% en la cuenca del río Neuquén.
En julio el titular de AIC reconoció que hubo mayor generación eléctrica y bajaron los embalses. Durante la ola de frío en la zona central del país la demanda eléctrica creció y las centrales hidráulicas de Río Negro y Neuquén dejaron pasar una cantidad extraordinaria de agua por sus turbinas. En un año con un verano largo se exprimieron los caudales que buscan recuperar.
Caudal en baja
30%
de la media que suelen tener en esta época tienen actualmente los ríos de la región, aproximadamente.
“Ya empiezan los días lindos y si no hay caudal no se puede regar el parque del balneario. La solución sería hacer perforaciones”, dijo un operario municipal.
En el centro sobró
por una pérdida
La rotura de un caño de PVC, de 75 milímetros de diámetro perteneciente al EPAS, generó un río de agua en el barrio Zona Centro Oeste.
Operarios del ente provincial debieron trabajar por varias horas para lograr interrumpir el suministro y poder iniciar la reparación.
La fuga terminó destruyendo la vereda en la calle Antártida Argentina al 917.