Además reclaman la presencia del EPAS. También cerró una escuela.
Vecinos de Picún Leufú se autoconvocaron en la plaza central de la localidad para exigir a las autoridades municipales y provinciales que suministren en lo inmediato agua mineral porque lo que se provee a través de la red no se puede tomar. "Es agua con barro", afirmaron.
Anahi Moreno, una vecina del pueblo, expresó la preocupación colectiva que existe en la comunidad y comentó que "hay muchos casos de niños con diarrea en el hospital". Otro poblador, Andrés Szlejchev, dijo que denunciará penalmente al EPAS y al Municipio, como responsables de esta situación.
En tanto, el director de la escuela secundaria Nº 16, Adolfo Leiva, resolvió ayer suspender las clases; mientras otros establecimientos educativos como la primaria Nº 167 decidieron cortar el refrigerio.
Allí no tuvieron la necesidad de mandar a los alumnos a sus casas porque reciben agua mineral por parte del Municipio, aunque el aporte, según sostienen, no alcanza. Leiva aclaró que no se trata de una medida de fuerza sino de preservar la salud de la comunidad educativa. "En estas condiciones no podemos dar clases. Y como docentes, además de educar, tenemos que garantizar la integridad física de nuestros alumnos", expresó.
Consideró que es "lamentable" la situación que atraviesa no sólo la escuela sino toda la comunidad, y adelantó que el dictado de clases será suspendido en tanto y en cuento no se suministre agua mineral para salir del paso. Según evaluaron los vecinos, el agua ni siquiera sirve para la limpieza e higiene personal y del hogar. "Te bañás y te pica la piel, y cuando lavás la ropa se ensucia porque el agua es más arcilla que otra cosa", relataron.
A pesar de ser recurrente esta situación, aseguraron que no tienen respuestas. "La Municipalidad delega en el EPAS y éste en la empresa contratista (Sombras), que tampoco se hace cargo", afirmó Szlejchev. Los únicos en recibirlos durante la jornada de ayer fueron los concejales, según indicó Moreno, quien a su vez comentó que de la asamblea surgió la necesidad de que autoridades provinciales se acerquen a la localidad. "Queremos que se haga presente el EPAS.
Los filtros en la planta no están funcionando al igual que el sistema de clorificación, mientras se arriesga la salud de nuestros chicos y ancianos", denunció. Los vecinos consideraron, además, que es un despropósito tener que comprar agua mineral cuando se paga por un servicio que debe garantizar no sólo la cantidad sino la calidad del recurso. "La mayoría no puede afrontar este gasto", indicaron.